El mercado argentino de tratamientos para la obesidad se expande con nuevas inyecciones que combinan mayor accesibilidad y potencia. Desde octubre, está disponible Wegovy, ahora se suma Obetide, una versión local más económica, Mounjaro.
Estos medicamentos actúan como miméticos de hormonas intestinales, reduciendo el apetito y retrasando el vaciado gástrico. Además, disminuyen riesgos cardiovasculares y mejoran el control de la diabetes tipo 2.
Por su parte, Wegovy logra una pérdida del peso corporal y reduce eventos cardíacos graves.
Obetide, producida por un laboratorio argentino, ofrece el mismo principio activo pero a un precio mucho menor.
Mounjaro introduce una molécula dual que actúa sobre dos receptores hormonales, logrando hasta una pérdida de peso, y de grasa. Su llegada está prevista para las próximas semanas.
Los tratamientos requieren supervisión médica estricta. Sin cambios en la dieta y el ejercicio, el peso suele recuperarse al suspender la medicación, ya que la obesidad es una enfermedad crónica.
En Argentina, una versión genérica ya cuenta con cobertura total en obras sociales para casos específicos de diabetes y sobrepeso con complicaciones cardíacas. La regulación exige receta médica, incluso para usos estéticos.
Con estas opciones, el país avanza en la lucha contra la obesidad, aunque el éxito dependerá de combinar fármacos con hábitos saludables y políticas de prevención.