“Ella era boliviana y nunca pudo concretar el trámite para tener la residencia permanente en el país, entonces no podía acceder a ninguno de los beneficios sociales. Se acercó a pedir un plato de comida para llevar a la casa, y ahí empezó a participar”, contó Ana Gamorro, vecina del barrio e integrante del FOL. Los vecinos relatan que la situación crítica del barrio se recrudeció con la pandemia: el hacinamiento, las viviendas precarias, la falta de trabajo e ingresos, la falta de comida y elementos de higiene y protección que los prevengan del Covid-19, son algunas de las problemáticas a las que le hacen frente en lo cotidiano. Por eso el FOL llevó a cabo una segunda jornada de ollas populares y reclamos en los barrios populares, exigiendo un “fondo de emergencia urgente” para atender la situación en las villas. |