En ese marco, un grupo de legisladores y diputados, presentaron dos proyectos de ley que proponen declarar al puente transbordador Patrimonio Histórico y Cultural. "Es muy emocionante haber recuperado este puente que es un símbolo del Sur de nuestra Ciudad y de nuestra Provincia. Un puente que nos une y nos hace pensar como una sola AMBA, algo que ya vimos que es importante en el marco de la pandemia a la hora de articular políticas públicas de un lado al otro del Riachuelo", expresó la diputada Nacional por la Ciudad Paula Penacca, vecina de La Boca e impulsora del proyecto de ley que busca declarar como Patrimonio Histórico. En tanto, el legislador porteño y asesor presidencial, Leandro Santoro contó que "Cuando era pibe, ir a la Isla Maciel era incursionar en un submundo. Una de las asignaturas pendientes que tenemos en la Ciudad es la gran diferencia que existe entre el Norte y el Sur, e incluso dentro del Sur mismo, y el principal desafío que debemos plantearnos es construir para que la Ciudad de Buenos Aires sea un entramado armónico y no un conglomerado de guetos". El Puente Transbordador Nicolás Avellaneda es uno de los 8 de su especie en todo el mundo y es una obra de ingeniería única en América del Sur, lo que lo convierte en un ícono identitario del barrio de La Boca, de la Ciudad de Buenos Aires y del país. Fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1999 y desde el 2019 fue reconocido con el Escudo Azul de la UNESCO, que lo convierte en un sitio protegido en caso de conflicto armado. Además de ser un ícono cultural y patrimonio urbano de nuestra Ciudad, su funcionamiento ha sido restablecido recientemente, permitiendo la rápida conexión entre el barrio de La Boca y la Isla Maciel en Avellaneda, lo que resulta de máxima relevancia histórica para el área metropolitana de Buenos Aires. |