La exposición de un funcionario de Larreta en plena pandemia empieza a medir de cara al 2023

Según pudo saber averiguar Revista Qué el jefe de gabinete porteño, Felipe Miguel, buscará seguir los pasos del alcalde capitalino, aunque no para el turno electoral que viene, sino con la mira puesta en 2023.

Así al menos lo demuestra una encuestadora que llama a los porteños para preguntarles que puntuación le podría a las medidas que toma el gobierno porteño en ítems como salud, educación, pandemia. También pide que se puntúe varias figuras políticas como el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, el presidente de la Nación y hasta aparece María Eugenia Vidal, pero el dato más llamativo es mide la imágen del actual jefe de gabinete porteño Felipe Miguel. 

Una de las principales críticas hacía Miguel por parte de la política capitalina es la falta de carisma, pero el recorrido que ha hecho junto al jefe de gobierno porteño le habría dado confianza y despertado la ambición de ser jefe de gobierno cuando se termine el mandato de Rodríguez Larreta.

Lo cierto es que con la llegada del coronavirus que impactó a nivel mundial, Miguel comenzó a cobrar protagonismo. Suele participar de las conferencias de prensa que realiza el gobierno de la Ciudad donde brindar detalles sobre el avance del Covid-19 y las medidas que toman día a día desde el Ejecutivo.

Además, el jefe de gabinete es uno de los funcionarios del gobierno que tiene puesta la camiseta de Larreta y sale a la calle cada vez que el jefe de gobierno lo pide. 

Miguel comenzó a trabajar más su perfil político para poder encarar una posible candidatura de acá a cuatro años. La idea es tener la posibilidad de competir por ese cargo en la Ciudad. Y aunque el 2023 es una fecha lejana, sabe que tendrá oponentes de peso llegado el momento.

Otra de los personajes de la política que podría perfilar para ese cargo es Karina Fernández. íntima confianza del alcalde porteño. Larretista paladar negro, llegó al Gobierno de la Ciudad desde el sector privado y se ganó la confianza del entonces jefe de Gabinete de Macri, cuando dirigía la Ciudad, rápidamente.

Tiene a su cargo proyectos estratégicos, custodia el perfil de Rodríguez Larreta y es casi la única funcionaria con margen para decirle lo que sea a la máxima autoridad. Con el nuevo gabinete, Larreta accedió a darle a Karina  un rol más público y la nombró "Secretaria de Estado" del gabinete porteño, un rol que en los hechos le permite empezar a blanquear una influencia que viene de lejos y está en expansión.